A la hora de someterse a un tratamiento de depilación láser es importante seguir algunas recomendaciones con el fin de que el tratamiento se realice de la manera más segura y efectiva:
1.- No depilarse la zona a tratar con ningún método de extracción como la cera o las pinzas al menos un mes antes de la sesión de láser. Desde un mes antes del inicio del tratamiento, y entre sesión y sesión, se deberá depilar la zona con métodos que corten el vello, tales como rasuradora o crema depilatoria.
2.- Evitar totalmente la exposición al sol en la zona a tratar al menos cinco días antes y cinco días después de la sesión de láser, para eliminar el riesgo de posibles quemaduras y manchas permanentes en la piel.
3.- Hidratar lo máximo posible la zona en los días previos a la sesión para que la piel soporte bien la agresión del láser.
4.- Rasurar la zona a depilar el día anterior a la sesión, y hacerlo con agua caliente para que la piel no sufra irritaciones y esté sana en el momento de la depilación.
5.- No vestir con ropa vaquera el día de la sesión, ya que ésta suele desteñir algo la piel, provocando, en ocasiones, la aparición de quemaduras.
6.- Tras la depilación es importante hidratar la zona tratada de manera abundante para que ésta pueda recuperarse de la manera más rápida posible.
7.- Evitar, en la manera de lo posible, vestir con ropa ajustada a la zona recién depilada para evitar irritaciones.
8.- En las 24h posteriores a la sesión de depilación se recomienda no ducharse o tomar baños con agua muy caliente para evitar sensibilización en la piel.
9.- Se recomienda no emplear desodorante con alcohol en los días posteriores a la depilación de axilas para evitar irritaciones.
Siguiendo estas recomendaciones tu tratamiento de depilación láser será completamente seguro.